JORNADA SOBRE CABINAS DE PINTURA EFICIENTES EN TALLERES DE REPARACION DE VEHICULOS.

En primer lugar, agradecer a la Comunidad de Madrid, el esfuerzo y la oportunidad prestada para la realización de este evento.
Como todos Vds. saben los puestos de pintura, ya sean cabinas o zonas de preparación y pintado, son la herramienta más costosa a la hora de la inversión en el taller, tanto por la propia compra de los equipos como por los costes de energía y tiempo en la reparación de los vehículos.

Las cabinas de pintura están dotadas de elementos que nos permiten la aplicación de los productos necesarios para la reparación de los vehículos, como ventiladores industriales, centrales térmicas y equipos de iluminación.
Todos estos elementos consumen gran cantidad de energía y tiempo que redundan en los gastos de reparación del vehículo.
Atendiendo a la merma en las horas facturadas por vehículo es posible que en algún caso de reparación y utilizando herramientas que no estén dotadas de elementos de ahorro en tiempo y energía, la cuenta de resultados de la reparación pueda ser negativa.
Atendiendo a las nuevas tecnologías que ya se están utilizando desde hace bastante tiempo en procesos industriales, es necesario dotar a los puestos de trabajo de elementos tecnológicos, como:

• Inverter automáticos que detectan cuando es necesario el funcionamiento de los
  ventiladores y a su vez, de la central térmica, no como en la mayoría de los casos actuales,
  que producen un derroche de energía y tiempo excesivo e innecesario. Con la dotación de
  este equipo el ahorro puede llegar hasta el 47%.

• Elementos de aislamiento: Algo tan sencillo como un buen aislamiento de una cabina de pintura, reduce costes de energía y su aprovechamiento máximo impidiendo la fuga de energía.

Tabla orientativa de consumo anual por ciclo.

• Cabina PIPER

Hay que tener en cuenta que una cabina de vena de aire trabaja a una temperatura de 80º y acorta el ciclo de secado entre un 35% y un 50% dependiendo del tipo de pintura aplicada.

• Cabina STEALTH

Es necesario dotar al taller de puestos de trabajo eficientes energéticamente y que reduzcan el tiempo de reparación, sin mermar la calidad.
Y lo que es si cabe más importante, la tecnología de la vena de aire, tecnología que utiliza en exclusiva, el gas como combustible para el necesario atemperado de la aplicación de las pinturas y el secado.
Como media podemos decir que una cabina de pintura que utilice gas-oil como combustible, puede llegar a tardar 20 minutos en alcanzar una temperatura del aire de 60º y cabina de pintura con la tecnología de vena de aire, tarda 2 minutos en alcanzar 80º.

Las cabinas de pintura que están dotadas de intercambiador de aire-aire y que utilizan como combustible gasóleo, adolecen de una tecnología obsoleta, ya que emiten al exterior a través de su chimenea de humos una gran cantidad de energía que no es aprovechada en el proceso de reparación, consiguiendo como máximo un rendimiento del 82%, asimismo en su combustión producen hollines que merman la durabilidad de los filtros en la cabina de pintura. Produciendo en algunos casos, por contaminación del combustible siliconas que nos obligan a la repetición de los trabajos.

Las cabinas de pintura CMC dotadas con tecnología vena de aire, no tiene intercambiador aire-aire, transmitiendo instantáneamente la temperatura al interior del puesto de pintado, que junto con el aislamiento con el que viene dotados conseguimos un rendimiento del 98% y logrando una temperatura en el interior de la cabina de entre 80 y 90º en 2 minutos, reduciendo enormemente el tiempo en el proceso de secado.
Como ventajas inherentes a la instalación de gas en un taller de reparación, podemos sumar la no necesidad de instalación de un depósito que merma el espacio en el taller y nos supedita al control exhaustivo del combustible que tenemos, pudiendo tener en algunos casos tiempo de parada, por falta de combustible.
La tecnología de la vena de aire es una tecnología segura, limpia, eficaz y económica, que ha dejado de ser de difícil acceso.